Problemática en la elaboración de enjuagues para boca seca
Actualmente se prescriben distintas soluciones para enjuagues bucales en el síndrome de la boca seca. Suelen contener distintas sales (cloruro sódico, cloruro potásico, cloruro cálcico, etc.) y ácidos como por ejemplo ácido cítrico anhidro o ácido ascórbico que actúan estimulando la salivación. También contienen edulcorantes como glicerina, sorbitol; protectores de la mucosa como el gel fluido de carboximetilcelulosa sódica y esencias de menta, limón, fresa, etc.
Un gran problema para el farmacéutico es cómo incorporar las esencias, ya que los excipientes citados anteriormente no tienen capacidad solubilizante (glicerina, sorbitol, carboximetilcelulosa sódica). Si se añaden sobre la solución sin emplear un solubilizante adecuado acabarán flotando en la superficie de la solución en forma de gotas amorfas. La homogeneidad de estas esencias será nula en el seno de la solución y el paciente corre el riesgo de sufrir cierta irritación de la mucosa bucal cuando haga un enjuague con alta concentración en esencia. Hay pues, un claro error de dosificación por falta de homogeneidad. Veamos un ejemplo en la siguiente prescripción:
Carboximetilcelulosa sódica, 1 % Sorbitol, 20 % Cloruro sódico, 0,5 % Acido cítrico anhidro, 0,4 % Esencia de menta, 0,5 % Agua purificada csp, 100 ml Una vez elaborada la solución, añadimos la esencia y agitamos a alta velocidad. Dejamos reposar unos minutos y vemos cómo la esencia se sitúa flotando en la superficie de la solución formando gotas amorfas. No hay homogeneidad. Se prueba incluso a incorporar la esencia junto con el sorbitol pero al final se obtiene el mismo resultado. Es necesario añadir un solubilizante que disuelva a la esencia en la solución acuosa y que no tenga un gusto amargo como ocurre con los polisorbatos (Tween 20®, Tween 80®). El Cremophor RH 40® (aceite de ricino polioxietilenado) es un solubilizante capaz de disolver a las esencias en solución acuosa y además no tiene sabor amargo. Se emplea mucho en la formulación de colutorios comercializados. Para lograr una completa solubilización de la esencia de menta según nuestra prescripción, se tiene que emplear un 1,5 % de Cremophor RH 40®. ¿Cómo incorporar la esencia de menta? La esencia se disuelve en el Cremophor RH 40®. La solución altamente viscosa obtenida se añade en pequeñas porciones sobre la solución acuosa agitando en un agitador magnético regulado a alta velocidad. Se obtiene una solución algo viscosa (debido a la carboximetilcelulosa sódica), límpida y transparente. La esencia queda completamente solubilizada en el seno de la solución.
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